Está demostrado que el Hatha Yoga colabora a la disminución de la hipertensión, reduciendo las tasas cardíacas y la presión sistólica y diastólica, y el aprendizaje de la relajación progresiva, con importantes reducciones de estrés.
Además la dieta Yóguica que es vegetariana, reduce en un 90% la posibilidad de contraer cardiopatías relacionadas con el elevado nivel de colesterol sérico.